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Las canciones en inglés para niños son un elemento imprescindible para el aprendizaje del idioma en edades tempranas. Gracias al ritmo y a la melodía pegadiza de estas canciones los niños adquieren el lenguaje de una manera natural y divertida.
Las canciones para niños son algo que está presente de manera habitual en nuestro día a día. Por ello, en el caso de los pequeños, es extraño no oír a ningún adulto cantarles alguna canción. Supone una forma de conectar con el niño, así como de transmitirle conocimientos. En el caso del inglés, supone una herramienta fundamental en el aula. Desde los momentos que se repiten cada día, como es la asamblea o la despedida, hasta el apoyo del trabajo de una temática en concreto. En las sesiones de Great Little People son un elemento muy presente. Usamos tanto nuestras propias canciones como las que son más populares en estas edades.
¿Quién no recuerda las canciones que cantaba de pequeño? Las canciones infantiles tienen unas frases sencillas de aprender y cuentan con una musicalidad muy fácil de recordar. Un claro ejemplo de ella es “If you´re happy and you know it”.
Como ya hemos mencionado, su estructura es simple. Esto resulta llamativo para los pequeños porque son capaces de entender la letra con facilidad. Muchas de ellas tienen estribillo o partes de que repiten y le ayudan a memorizar conceptos rápidamente, como es el caso de la canción “Five Little monkeys”.
En Great Little People usamos algunas canciones de forma habitual para aquellos momentos que se repiten en cada clase. De esta manera, los niños van aprendiendo cómo se desarrollan las sesiones y son capaces de anticiparse a lo que va a suceder a continuación.
La gran mayoría de ellas viene acompañada de un baile o un conjunto de gestos. Esto, además de resultarles muy divertido, les ayuda a coordinar y perfeccionar los movimientos de su cuerpo. Existen canciones en las que trabajamos la motricidad gruesa, como esta conocida canción “Head, shoulders, knees and toes”, y otras en las que está más presente la motricidad fina como “One Little finger”.
Nuestro método fonético cuenta con una canción específica de cada fonema. Esto ayuda a que el pequeño perciba la pronunciación correcta de forma aislada y a que lo relacione con las palabras que llevan ese sonido.
Las canciones en inglés suponen una herramienta lúdica a la hora de adquirir el lenguaje. Con lo cual, cuentan con unos pasos o movimientos que motivan al niño a participar y disfruta haciéndolo.
Les motiva a relacionarse con los demás y por lo tanto a ganar seguridad a la hora de comunicarse en inglés. Para terminar, os animamos a que introduzcáis las canciones en inglés en vuestro día a día y observéis cómo aprenden el lenguaje de forma lúdica.
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